La Intendenta participó de actividades y ordenó restructurar el San José

Con la llegada de Delfino a la intendencia, la gestión y supervisión del lugar volvieron a manos de la comisión, la cual estaba mayormente conformada por individuos que el propio Intendente había designado. Lamentablemente, esta transición no resolvió adecuadamente la situación y culminó con graves acusaciones de maltrato, deficiencias en la alimentación, infestación de chinches, tratos inapropiados hacia los ancianos, y una falta total de control y vigilancia por parte de las autoridades municipales y de Salud Pública, problemas que le fueron planteados al propio Intendente, la Directora de Acción Social, la referente de la Unidad Local de Protección de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, integrantes de la administración del Hogar e integrantes de la comisión de aquel momento, cada una de las graves denuncias realizadas por dos mujeres que diariamente visitaban el lugar para llevar la palabra de Dios, fueron negadas, rechazadas y hasta fueron advertidas de que se podrían llegar a tomar medidas judiciales si siguían manteniendo esas acusaciones, luego se comprobó que las integrantes de la Iglesia decían la verdad.

Luego, nueva comisión se hizo cargo para mejorar la situación, pero se enfrentó a desafíos edilicios serios que la Municipalidad no abordó. Surgieron denuncias policiales por incidentes en el Hogar y un despido injustificado de una trabajadora con licencia médica, lo que generó un juicio pendiente que probablemente requerirá compensación económica.

En menos de medio año, la mayoría de la comisión renunció, dejando apenas a 2 o 3 personas relacionadas con la institución. Previamente, habían logrado que el Concejo Deliberante transfiriera la propiedad del Edificio San José a la Comisión Administradora. Esta situación pone en riesgo el edificio en caso de continuar el juicio, ya que no habría responsables solidarios para cubrir los costos judiciales y laborales.

Recientemente, se ha anunciado que Graciela López tiene la intención de devolver la administración del Hogar San José al control del Ejecutivo Municipal. Esto podría arrojar luz sobre aspectos muy delicados, como los malos tratos a los ancianos, el deterioro del edificio, los controles sanitarios, psicológicos, la provisión de dietas, actividades y alimentos adecuados para los residentes. La Intendenta ha dispuesto un operativo de recreación, incluyendo un paseo por la localidad en la Combi Municipal, lo que seguramente permitirá a muchos habitantes del lugar reconectar con su comunidad que los vió nacer. Además, se ha instruido la ampliación del personal de atención a los ancianos, la distribución de alimentos y otras medidas orientadas a mejorar la gestión del lugar, el cual fue concebido y financiado por los ciudadanos de Catriló en los años 60 y construido por personal municipal en un terreno que también pertenecía a la localidad.